Para percibir el color, se requiere una fuente de luz y que el ojo humano perciba la ilusión del color.
Óptica. Eugene Hecht. 2000
Una vez más el pintoresco Pueblo Quieto ha sido cubierto por el oscuro manto y debajo de éste, comienzan a urdirse como cada noche; las pasiones, las mentiras, las tragedias, y las miserias. Después de todo, dentro de unas cuántas horas, volverá sigilosa la aurora y con ella, por otras cuántas horas, el sosiego y el color.
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